Una vez en la carretera, pues un poco lo de siempre también. Salida rápida, varios grupos salteados antes de llegar al cámping y reagrupamiento en l'Arboç. Hasta Sta. Cristina todos juntitos y al comenzar la subida, de nuevo cada uno busca su ritmo. Reagrupamos al coronar de nuevo y hacia el almuerzo en Rodonyà. Una buena parte del pelotón continuó con su ruta y no paró todo el mundo. Hay gente con retos más a corto plazo y ya está con algunos objetivos entre ceja y ceja.
El aire de los restaurantes es ahora más puro y limpio, cosa que todos vamos a agradecer mucho (aunque el tema futbolero seguirá subiendo las temperaturas en algunas zonas).
El ritmo ha sido alto en la mayor parte del recorrido, parece que algunos no celebran la navidad o no les debe afectar como a los seres humanos de a pie. Hasta alguno decía, a la salida, que tras las navidades pesaba 1 kilo menos... Això es gravíssim!!!
El jovent trepitja fort!!! Cada vez salen más chavales jóvenes con nosotros y parece que la cantera no va mal del todo.
Tras la salida, esperamos a los que tardaron más en pagar y una vez pasó el ave empezamos a enganchar vagones como pudimos. Desde aquí ya no iba a haber tregua hasta casa, todos bien enfiladitos hasta que el cuerpo iba aguantando. 
Para esta semana se esperan más sorpresas en los planes de entrenamiento Albertianos y, aunque no quiero adelantar acontecimientos, esta imagen os puede servir de horientación.
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