Ha servido, sobretodo, para desconectar un poco de la veloz vida cotidiana y tirarse al monte al disfrute de la vida contemplativa. Parajes maravillosos, silencios y sonidos impagables, aire 100% sin aleaciones raras...
A la llegada, el viernes, se aventuraba fresquito el tema y así fue, pero la lluvia remitió y se hacía más llevadera la estancia. Sábado y domingo, con mejor tiempo, se hizo más agradable y se podía disfrutar, más todavía todo aquello.
En la visita a Olot, lo primero que encontramos fue un cartel del Ayuntamiento que invitaba a la "botifarrada popular" y el lema era: "Fem botifarrada a l'hispanitat..." Buenísimo!!! El pueblo, por cierto es una verdadera preciosidad. Calles estrechas, rincones sorprendentes por todos lados, una catedral impresionante, un embutido de otro planeta...
La gran sorpresa del camping fue descubrir lo acertados que estuvimos con la calle, cosa que no apreciamos hasta la mañana y no al escoger la inmejorable parcela.

La Garrotxa es una zona volcánica, con unos bosques impresionantes y unas vistas por todos lados que deberíamos visitar más a menudo los amantes de la naturaleza. Hay rincones así, que en los tiempos que vivimos, parece que no puedan existir. La Fageda d'en Jordà es una auténtica maravilla de la naturaleza. Un gigantesco bosque por descubrir, al que una pequeña senda te invita a pasar, haciéndote sentir minúsculo, y conocerlo en relativa profundidad.
Aquí una foto de grupo, de los excursionistas...
A ver si me pasan las fotos de la cámara y cualego alguna de más calidad, que estas son con el teléfono...
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